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Periana
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  • ¿Quieres asomarte al mejor anfiteatro natural de Europa? Sólo tienes que acercarte a Periana. Desde este pueblo de las tierras altas de la Axarquía, las vistas te dejarán sin palabras. A su impresionante riqueza paisajística se suma su singular arquitectura y sus arraigadas costumbres.

    De Periana no puedes marcharte sin probar sus sabrosos melocotones y su aceite de oliva verdial de extraordinaria calidad. En torno a estos productos se celebran anualmente dos fiestas que se han convertido en citas ineludibles en el calendario de la comarca.

    EN PERIANA NO PUEDES PERDERTE

    MONUMENTOS

    La iglesia de San Isidro Labrador es el monumento más notable de Periana. Construida en estilo neomudéjar tras el terremoto de 1884, consta de tres naves separadas por arcos apuntados. Del exterior destaca su fachada de ladrillo visto y del interior, la solería de terrazo policromado.

    A dos kilómetros y medio de la villa, en la pedanía del mismo nombre, se encuentran los Baños de Vilo. Se trata de un balneario situado a más de 600 metros sobre el nivel del mar, con una poza de brocal esculpida hace más de mil años. Por las propiedades terapéuticas de sus aguas y la belleza del paisaje que lo circunda, es un enclave de obligada visita.

    De regreso a la villa te esperan sus casas señoriales del siglo XVIII, el antiguo Lavadero Municipal y la Fuente de Periana, que fue durante décadas el centro de la vida social.

    Mención aparte merece el Museo del Aceite de Mondrón, con sus tradicionales aperos y piedras de molienda. Sus instalaciones brindan la posibilidad de conocer los procesos de elaboración del producto que ha dado fama a este pueblo de la comarca de la Axarquía.

    Y para disfrutar de unas espectaculares panorámicas del entorno, nada mejor que acudir a la plaza de la Lomilleja. Desde su mirador podrás divisar la depresión del río Guaro y el embalse de La Viñuela.

  • Periana se sitúa en el límite con la provincia de Granada, al norte de la comarca de la Axarquía. Le separan 48 kilómetros de la capital de la provincia de Málaga. Para llegar a este pueblo se toma la Autovía del Mediterráneo (A-7) y luego el desvío hacia la A-356 en Vélez-Málaga. Llegando al embalse de La Viñuela, se toma la A-402 y continuar por la C-340, que conduce hasta Periana.

  • RECURSOS NATURALES

    Periana posee una decena de rutas senderistas para descubrir los hermosos parajes naturales que rodean el pueblo. Uno de estos itinerarios lleva a los Baños de Vilo, atravesando el nacimiento del río Guaro, que desemboca en el pantano de La Viñuela. Otros conducen hasta la sierra o discurren por campos de olivos milenarios, yacimientos arqueológicos y molinos aceiteros.

    Del paisaje montañoso, presidido por las sierras de Alhama y de Gallo-Vilo, sobresale el Puerto del Sol. Contemplar las encinas enraizadas entre los roquedales es todo un espectáculo. Al sur, se extienden los olivos de cuyos frutos se extrae el famoso aceite de oliva verdial.

    Periana es una parada esencial de la Ruta del Aceite y los Montes, que gira en torno a la cultura del llamado oro líquido. Este itinerario, declarado de Interés Turístico de Andalucía, recorre también los municipios de Alfarnatejo, Colmenar, Riogordo, Alfarnate, Alcaucín y La Viñuela, junto a enclaves de singular belleza.

    FIESTAS POPULARES

    Periana celebra en mayo las fiestas de San Isidro Labrador, con verbenas, pasacalles, conciertos y la procesión del santo por las calles del pueblo. Los festejos, paradójicamente, no acaban al concluir la feria, ya que el fin de semana posterior tiene lugar la romería del patrón de la villa.

    En verano es el turno de la Feria de Agosto y del Día del Melocotón, dedicado a ensalzar uno de los productos más representativos de Periana. Entre sus actividades destaca un concurso gastronómico de platos elaborados con esta fruta que goza de una merecida reputación.

    Otra cita ineludible es el Día del Aceite Verdial, declarada de Interés Turístico Provincial. Durante la jornada podrás disfrutar de un típico desayuno molinero, degustar productos autóctonos de la comarca o participar en una cata de aceite. Todo ello amenizado con música de verdiales.

    GASTRONOMÍA

    Como no podía ser de otra forma, el aceite de oliva verdial es el ingrediente básico de la gastronomía tradicional de Periana. Con él se elaboran las sopas cachorreñas, las migas, el ajoblanco, el gazpacho y el gazpachuelo. Pero también las parpuchas, los morretes con salsa de almendras y las tortillitas de bacalao con miel.

    Para el postre, los famosos melocotones de Periana constituyen una elección casi obligada. Mientras que en repostería destacan la torta romana, los roscos de vino y las tortas de aceite.

  • Historia

    En Periana se registraron asentamientos humanos desde el Musteriense, en el Paleolítico Inferior. Así lo confirman los yacimientos del Cerro de Alcolea, cerca de Mondrón. También se encontraron restos del Neolítico en el Cerro de El Fuerte y en el abrigo de Marchamonas. En la zona de la Capellanía, junto a La Viñuela, aparecieron además vestigios de talleres líticos de la Edad de Bronce.

    Durante la época árabe, Periana debió de ser una reducida alquería. Las crónicas del siglo XV se refieren a su territorio como un simple lugar de paso de las tropas cristianas provenientes de Archidona que acudieron a la conquista de Vélez en 1487. Tras la toma de la comarca de la Axarquía por los ejércitos de los Reyes Católicos y la posterior expulsión de los moriscos, estas tierras quedaron despobladas.

    La constitución del pueblo actual data del siglo XVIII. El momento clave fue la conversión de la pequeña ermita de San Isidro Labrador en iglesia en 1761. A partir de ese año dejó de pertenecer a la jurisdicción de Riogordo. Décadas más tarde, colonos procedentes en su mayoría de Andalucía Occidental comenzaron a llegar al municipio y a urbanizarlo. Este desarrollo se vio frenado por el terremoto de 1884.

    El seísmo, que sacudió con especial virulencia la comarca de la Axarquía, hizo estragos en Periana. Muchas casas quedaron destruidas y murieron 58 vecinos. En enero de 1885, Alfonso XII visitó la localidad para comprobar los efectos del temblor de tierra. El rey destinó entonces una partida de 300.000 de pesetas para paliar los daños. Este importe sirvió para edificar la nueva iglesia de San Isidro y el barrio que la rodea.

    Hoy en día Periana es un pueblo de gente hospitalaria, cuya economía se basa en las explotaciones agrícolas. En este sector predomina el cultivo del melocotón, que algunos consideran el mejor de España, y la producción de aceite verdial. Además, es un destino ideal para los aficionados al turismo de interior y de naturaleza.

    Introducción del melocotón

    El cultivo del melocotón lo introdujo en Periana un vecino de la localidad apodado "El Rojo". Hace ya más de doscientos años, el lugareño viajó a Argentina para visitar a un familiar y trajo plantones de melocotoneros. La benignidad del clima y la fertilidad de los campos propiciaron la extensión del "durazno" por estas tierras.

    Leyenda

    Existe una leyenda en torno al origen de la denominación del pueblo. Según la tradición oral, antaño existían dos familias enfrentadas por querer dar su apellido a la villa. Las disputas entre los Pereiro y los Santana subieron de tono y ninguna cejó en su empeño. Para zanjar la pelea, se mezcló el nombre de los dos linajes. Periana fue el resultado.

    Otra versión de la historia cuenta que Pereiro y Santana eran dos asentamientos defensivos que había en la zona durante la época árabe. Entre ambos enclaves había gran prado. En ese lugar surgió en 1761 el pueblo actual. Para bautizar a la nueva localidad, se buscó una combinación de aquellos nombres.

  • La cosecha principal es el aceite de oliva verdial, elemento que forma parte importante de las recetas de este pueblo. Los platos más característicos son las sopas cachorreñas, las migas, el ajoblanco, el gazpacho y el gazpachuelo. Pero también las parpuchas, los morretes con salsa de almendras y las tortillitas de bacalao con miel.

    Para el postre, los famosos melocotones de Periana. Así como la torta romana, los roscos de vino y las tortas de aceite.

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Características

  • Habitantes (2.501-5.000)
  • Zona de interior

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